Cuando era muy pequeña se vio obligada a dejar de estudiar y jugar para convertirse en una "ama de casa" en la suya y en la de otros. Siempre quiso aprender, así que por las noches leía libros, aprendía las letras y fabricaba sueños.
Ahora, gracias a su esfuerzo, esta joven de 21 años trabaja como voluntaria para Calcutta Social Project, la ONG local con la que trabajamos en India. Ella colabora en los distintos proyectos dando apoyo a los profesionales. Así, ella ayuda a nuestros profes a dinamizar las clases de nuestro proyecto "Lápices digitales".
Su colaboración tiene recompensa: clases de inglés e informática gratis, en contrapartida a su colaboración. "Así, puedo seguir aprendiendo y convertirme en una mujer libre", asegura. Con su inmensa tenacidad lucha para que los derechos de las mujeres se vean reconocidos y -añade- "el primer paso es aprender, recibir educación, para luego poder tomar mis decisiones libremente".
Su sueño lo tiene muy claro: "estudiar, encontrar un buen trabajo, ser libre y luchar por mis derechos".
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